martes, 17 de septiembre de 2013

Seleccionado para Calabazas en el Trastero: Especial Mitos de Cthulhu

La semana pasada salieron los resultados de la Convocatoria Calabazas en el Trastero: Especial Mitos de Cthulhu. Seguro que ya habéis visto cuáles son los relatos seleccionados, pero para que quede bonito ahí van, en riguroso orden alfabético:

  • En los oscuros recodos del tiempo, por Gema del Prado Marugán y Miguel Martín Cruz
  • Escribiendo el Miserere, por Pablo Loperena
  • Fe, por Santiago Eximeno
  • La caída del hombre, por Carlos García
  • La Otra Ciudad Sin Nombre, por Patricio G. Donato
  • La transfiguración, por Ricardo Giráldez
  • Las manos que las aniquilan, por Víctor Villanueva Garrido
  • Los Que Descienden Al Mar En Naves, por Javier F. Bilbao
  • Memorias de un esquizofrénico, por Eduardo Casas Herrer
  • Neotenia, por Aitor Solar
  • Nigredo, por Josué Insua
  • Scharat Tse On Aaritse, por Juan Ángel Laguna Edroso
  • Y a dibujar tentáculos, por Daniel Guzmán Álvarez

Creo que va a quedar muy buen libro, además de por los propios relatos, gracias a la portada de Rodrigo Rodríguez Tendero y el prólogo de Mikel Rodríguez. Esperamos presentar el volumen a primeros de noviembre, ya iré informando de los detalles específicos. Pero hoy quiero hablar de otra cosa.

Hay un tema que a nadie se le escapa a poco avispado que sea, y es que mi nombre aparece entre los seleccionados. No soy el único miembro del jurado en esa situación, pero no voy a eso. Sopesé durante largo tiempo si era conveniente presentarme o no al concurso. Estaba amparado por las normas (uno no se puede votar a sí mismo, los demás jueces no saben que el relato es tuyo, y luego se hace la media con un voto menos), pero la esposa del César no sólo ha de ser honrada, sino parecerlo. Por otro lado, hay pocas oportunidades para publicar relatos de los Mitos en castellano y me parecía una muestra de apoyo hacer el esfuerzo de participar, y digo esfuerzo porque no tenía ningún relato adecuado disponible y se me echaba el tiempo encima.

Lo que acabó de decidirme fue esta entrada en su blog de Juan Ángel Laguna Edroso, precisamente el amo del cotarro en lo que a Calabazas en el Trastero se refiere. Él también ha aparecido en unas cuantas Calabazas siendo jurado (en esta misma sin ir más lejos, y os garantizo que no supe que el relato era suyo hasta que se hicieron públicos los votos; de hecho, otra obra que envió la puse a parir y aún no he recibido la visita de sus padrinos). Me gustó su frase "aquí lo que buscamos es hacer la mejor antología de género fosco posible". Yo creía que podía hacer un buen relato de los Mitos y debía intentarlo. Y si no salía elegido, pues en el fondo casi que mejor (aunque esto se dice con la boca pequeña, porque quien afirme que le da igual no ser elegido miente o no tiene sangre en las venas).

Cuando decidí que sí, que iba a escribir algo y enviarlo, me impuse el objetivo de que, si salía elegido, no debía quedar ninguna duda sobre la idoneidad de mi relato. No bastaba con que fuera bueno, había de ser el mejor. Que no cupiera ninguna sospecha de favoritismo. Debía dejar a todo el mundo diciendo "guau, este hombre sí que sabe escribir sobre los Mitos".

Fue un error, la presión que me habia impuesto a mí mismo me bloqueó y casi no llego a tiempo. Al final medí mal los ritmos narrativos y tuve que pasarme 150 palabras del máximo (y ojo, que mis compañeros casi me lo tiran por eso). El jurado me ha criticado, seguramente con razón, que los diferentes registros de cada personaje no están muy pulidos, y a eso añado yo que la acción está demasiado comprimida. Y aun así, cuando lo he releído ahora junto a los otros doce para decidir el orden en el que aparecerán en la antología, me ha quedado buen sabor de boca. ¿Es el mejor? Lo dudo. ¿Es una digna inclusión? Eso lo tendréis que juzgar vosotros, pero yo creo que sí. Estoy orgulloso de mi criaturilla, aun con sus defectos.

Otro día os hablo del relato en sí y de lo que me empujó a plantearlo en su forma definitiva.

4 comentarios:

Santiago Eximeno dijo...

A mí me encanta que coincidamos, y estoy seguro de que tu relato tendrá mucho más de Mitos que el mío, por ejemplo.

Entropía dijo...

Bueno, son enfoques muy distintos pero en la temática sí que se rozan (agua, familia...). Creo que voy a tener que poner unos cuantos entre medias :-|

Saludos,
Entro

Tristan Oberon dijo...

Siempre es un placer leerte, por lo que por mi parte no solo no hay ninguna duda de la legalidad del concurso sino que además estoy deseando leer ese relato! Eso si, te equivocas en una cosa, a mi no solo me da igual no haber sido elegido sino que incluso me alegra, si hubiera sido elegido mi relato hubiera sabido al momento que no iba a haber mucho nivel en la antología, ahora, viendo los nombres que veo entre los seleccionados, se que va a ser genial :)

Entropía dijo...

Pero si sólo has leído un relato mío, so pelota :-D

He visto cuál era el tuyo y no estaba nada mal, incluso con la casa heredada. El brusco cambio de ritmo le pesó, creo yo.

Saludos,
Entro